Come Eat

McKoy invites us to discover how a common dining-room table can be transformed into a place where brokenness falls away to reveal peace and fellowship. Whether the table is laid with bounty or with meager offerings, whether it is surrounded by the Body of Christ or homeless, broken souls, she shows us that healing begins when we say, "Come in. I may not know you, but I know your maker. And so I offer you my heart."

Cómo mantener una relación sana con la alimentación, sin prejuicios, mitos ni agobios, porque alimentarse ¡es mucho más que comer! Se come más de lo que se necesita. Se come menos de lo que se necesita. Se comen alimentos que no hacen falta y faltan alimentos imprescindibles. Se come de manera obsesiva. Se come para olvidar. Se come para no enfermar. Se come por ansiedad, por costumbre....

Cómo mantener una relación sana con la alimentación, sin prejuicios, mitos ni agobios, porque alimentarse ¡es mucho más que comer! Se come más de lo que se necesita. Se come menos de lo que se necesita. Se comen alimentos que no hacen falta y faltan alimentos imprescindibles. Se come de manera obsesiva. Se come para olvidar. Se come para no enfermar. Se come por ansiedad, por costumbre....