• 733. Día 9 Novena de Navidad para niños (Infantil)
    Dec 20 2025

    Hacer click aquí para enviar sus comentarios a este cuento.

    Juan David Betancur Fernandez
    elnarradororal@gmail.com



    Había una vez una pareja que estaba en una cueva junto a un buey y un burrito. Pero Jose y Maria eran felices. Presentian que aquel día 24 de diciembre era el día esperado. Sabian que los ángeles, los arcángeles y todos los coros celestiales se preparaban para cantarle al mundo la gran noticia.

    Eran las 12 de la noche , cuando el mundo estaba en silencio, sucedió el milagro. Sin castillos, sin sedas y sin coronas de oro, nació el Niño Jesús.

    El primer llanto Fue un sonido suave, como el de un pajarito. María lo tomó en sus brazos, lo abrazó muy fuerte y lo envolvió en unas telas blancas y limpias que tenía preparados. A su lado José no podía dejar de sonreír. Se acercó a María y al bebé, y con mucho cuidado, le dio un besito en la frente al Niño Jesús. ¡Ya era papá! Y era el papa del más grande ser que había nacido sobre la tierra.

    Por su parte el buey y el burrito Ellos fueron los primeros en ver al Rey del Mundo. Y Como no había calefacción, los dos animales se acercaron mucho al pesebre y soltaron su aliento calientito. Era como si le estuvieran diciendo: "Bienvenido, pequeño, aquí te vamos a cuidar".

    María acostó a Jesús sobre la paja suavecita del pesebre. ¡Ese cajón de madera se convirtió en la cama más importante de la historia! Un rey de amor y esperanza pasaría allí su primer día.

    Y ¡En ese momento el cielo "explotó" de alegría!

    Los Ángeles Ya no estaban de puntitas, ahora estaban volando por todos lados cantando: "¡Gloria a Dios en el cielo y paz a la gente en la tierra!".

    En el cielo algo empezó a llamar la atención de todos. La estrella que había estado creciendo en los días pasados ahora era una Gran Estrella: La estrella de Belén brilló tanto, pero tanto, que parecía que era de día. ¡Estaba avisando a todo el mundo que la Luz ya había llegado! Y era tal su tamaño que a miles de kilómetros de allí un grupo de 3 sabios vieron aquella luz y comprendieron que algo maravilloso estaba pasando y empezaron a caminar hacia donde esta estrella apuntaba porque sabían que debien estar allí.

    Cerca de allí los pastores que estaban regresando a belen acompañando a sus ovejas vieron que ahora si la estrella marcaba un lugar exacto a las afueras de Belen. Juntos escucharon y vieron a los ángeles dar vueltas sobre una pequeña cueva y comprendieron que el rey de reyes debía estar allí. , unos pastores estaban asustados porque vieron a los ángeles. Pero un ángel les dijo: "¡No tengan miedo! Vayan al establo, que allí ha nacido el Salvador".

    · Los pastores corrieron al establo. No tenían tesoros que darle , así que le llevaron lo que tenían: un poquito de leche, una mantita de lana de sus ovejas y, sobre todo, mucho amor. Se arrodillaron frente al pesebre y le dieron las gracias a Dios.

    Pero lo mejor estaría por venir. Aquel bebe traía el mensaje de amor que el mundo necesitaría en el futuro y después de su nacimiento millones de personas encontrarían la paz interior que el les prometía.

    Maria y Jose vivieron para criar aquel niño que nació un 24 de diciembre a las 12 de la noche pero su legado como padres ha llevado a que se les recuerde como los padres más importantes de la historia.

    Y el Bebe Jesus viviría muchas aventuras, pero eso es otra historia.

    Show More Show Less
    5 mins
  • 732. Día 8 Novena de Navidad para niños (Infantil)
    Dec 20 2025

    Hacer click aquí para enviar sus comentarios a este cuento.

    Juan David Betancur Fernandez
    elnarradororal@gmail.com

    Había una vez una pareja llamada Jose y Maria. Ambos habían viajado a Belen mientras esperaban el nacimiento del niño Dios. Este día era muy especial ya que estaban en una pequeña cueva rodeados por un burrito y un buey y empezaban a sentir que la naturaleza misma era conciente de que algo fantástico iba a pasar.

    En el cielo pese a que era de día había algo inusual. Una estrella había crecido y crecido hasta hacerse más brillante que el sol mismo. Era como si Dios estuviera diciendo. Miren algo maravilloso va a pasar en este lugar. Los pastores lo han visto y están caminando hacia el lugar donde se ha posado la estrella.

    En el cielo los ángeles están afinando sus arpas y practicando sus canciones de bienvenida al hijo de dios convertido en ser humano. Entre las nubes el sol anunciaba con sus rayos que aquel seria un momento inolvidable.

    En la pequeña cueva Jose que es carpintero dedica su tiempo a arreglar la cuna de manera que no haya ninguna astilla de madera que pueda molestar a nuevo bebe. Y Maria se dedica a cantarle esperando el momento del nacimiento.

    Junto a la cuna ya todo esta listo. El buey y el burrito que tanto los ha acompañado están a la expectativa y simplemente hacen un circulo de calor alrededor de ellos.

    Todo es paz y tranquilidad en aquel hogar improvisado, pero el amor de Dios se percibe constantemente.

    En belen la vida sigue normal sin que nadie se diera cuenta de lo que sucedia a pocos pasos de la puerta principal del pueblo.

    Pero el mundo estaba listo para recibir el rey de la paz y la bondad y un grupo de pastores están ya cerca de aquel lugar y simplemente prenden una fogata para esperar el siguiente día.

    Pero el el momento de la gran espera esta ya aquí.

    Show More Show Less
    3 mins
  • 731. Día 7 Novena de Navidad para niños (Infantil)
    Dec 20 2025

    Hacer click aquí para enviar sus comentarios a este cuento.

    Juan David Betancur Fernandez
    elnarradororal@gmail.com

    Había una vez una pareja llamada Jose y Maria, ellos habían sido escogidos para ser los padres terrestres del Nino Dios y después de 9 meses habían viajado a Belen para el Censo ordenado por el emperador.

    Allí en aquel pequeño pueblo todos los hospedajes estaban llenos y gracias a un alma caritativa encontraron un cueva a las afueras del pueblo donde pasar la noche. La cueva tenía un buey y junto a su burrito entraron para hacerle compañía a aquel animal. La noche era fría.

    Jose pues entro con maría a aquel lugar que tenía paja y con las ramas de una palmera cercana decidio limpiar aquel lugar para prepararlo para el posible nacimiento de su hijo. Sacudio cuidadosamente el polvo y acomodo la paja seca para que se convirtiera en una cama suave para su esposa Maria. Luego encendio una pequeña lampara de aceite que había llevado y ambos se durmieron.

    El buey que allí habitaba les pemitio compartir el calor que su cuerpo producia y junto al burrito les calentaban el aire con su aliento y luego rodearon a la pareja para que así pudieran dormir comodos.

    Esa noche habían cenado lo poco que llevaban. Un pedazo de pan, aceitunas y un poco de vino que llevaban en su viaje. Esto realmente no era mucho, pero para ellos era un banquete real porque se sentían a salvo y juntos. Pensaban que el niño que estaba a punto de nacer estaría confortable en el momento de su llegada.

    A la mañana siguiente jose vio que en la cueva había un cajon de madera que era utilizado para que el buey comiera su pasto. Este era del tamaño de una cuna por lo que jose que era un hábil carpintero lo arreglo un poco y luego con el pasto seco creo un ambiente confortable para que el niño pudiera dormir cuando haya nacido. Luego le puso una pequeña manta encima y se lo mostro a maría diciendo.

    Mira, Maria, aquí podrá dormir nuestro hijo. En ese momento Dios en el cielo sonrio al ver que su hijo que se había convertido en otro ser humano tendría un lugar humilde pero cómodo donde pasar los primeros días.

    En la zona había muchos pastores ya que las montanas ofrecían un sitio excelente para que las ovejas pudieran pastar. Allí algunos de ellos empezaron a sentir un llamado especial de la naturaleza y las ovejas comenzaron a caminar hacia Belen. Los pastores no sabían que sucedia pero si sentían que algo especial estaba a punto de suceder. La noche anterior les había llamado la atención la estrella que crecia en brillo y en su interior sentían una paz que hacia mucho tiempo no tenían

    Por esa razón decidieron seguir a sus ovejas hacia belen.

    Show More Show Less
    4 mins
  • 730. Día 6 Novena de Navidad Para niños (Infantil)
    Dec 20 2025

    Hacer click aquí para enviar sus comentarios a este cuento.

    Juan David Betancur Fernandez
    elnarradororal@gmail.com

    Había una vez una pareja que después de 3 dias de camino por el desierto ya se acercaban a su destino final Maria y jose veían como El sol se estaba ocultando y el cielo se volvía de color naranja y morado. A lo lejos, en la colina, se veían las casitas de piedra de Belén. María, sentada sobre el burrito, respiró profundo y dijo: "José, ya casi nace el bebé, siento que su corazón late muy fuerte". José, aunque estaba cansadísimo y con los pies llenos de polvo, apretó el paso para llegar antes de que oscureciera del todo.

    Al entrar a Belén, todo era un caos debido el ruido de muchas personas hablando al mismo tiempo, gallinas corriendo, carretas de madera chirriando y mercaderes vendiendo fruta s.Había tantas personas que José tenía que ir abriendo paso con sus manos diciendo: "¡Permiso, por favor, mi esposa necesita descansar!". Pero la gente estaba tan ocupada en sus cosas que casi ni los miraban.

    José tocó la puerta de la Posada Principal. El posadero salió con una vela en la mano y, antes de que José terminara de hablar, le dijo: "¡Imposible! Aquí ya duermen tres personas por cama, no cabe ni un ratón". ¡Pum!, cerró la puerta.

    José intentó en casas de amigos lejanos y en otros refugios. En todas partes escuchaba lo mismo: "No hay lugar". José miraba a María y se le aguaban un poquito los ojos porque quería que ella estuviera cómoda. Pero María le tomó la mano y le recordó que Dios nunca los dejaría solos.

    Finalmente, un hombre amable los vio tan agotados que sintió ternura. Les dijo: "Miren, mi posada está repleta, pero al fondo, detrás de la casa, hay una cueva que uso de establo. No es muy elegante, pero tiene techo, hay paja limpia para dormir ". Allí pueden pasar la noche, es un lugar muy humilde pero podrán descansar sin que nadie los moleste.

    José y María caminaron hacia allá. Al entrar, el olor no era a perfume, sino a pasto seco y a campo. Dentro de aquella cueva había un buey que dormía tranquilamente, Jose entro a aquel lugar y con mucho cuidado ayudo a maría a descender del burrito que los había traído desde NaZaret. El buey los miraba con curiosidad pero reconociendo en ellos seres especiales los dejo que se acurrucaran junto a el para así ofrecerles un poco de su calor. El burrito se acosto en la entrade del la cueva para así proteger a Mar y su preciado bebe que estaría próximo a nacer. .


    ¿Sabes qué hizo María apenas llegó? En lugar de quejarse porque el lugar era sencillo, empezó a acomodar la paja para hacer una cunita. Ella convirtió ese lugar oscuro y frío en un hogar lleno de luz.

    Show More Show Less
    5 mins
  • 729. Día 5 Novena de Navidad para niños (Infantil)
    Dec 20 2025

    Hacer click aquí para enviar sus comentarios a este cuento.

    Juan David Betancur Fernandez
    elnarradororal@gmail.com

    Había una vez una pareja llamada Jose y Maria Y como veíamos ayer había emprendido un difícil viaje desde Nazaret hasta Belen. Ya no estaban cerca de los riachuelos de su casa. Ahora estaban en el Desierto de Judea, Donde las montañas de arena y piedra parecen gigantes dormidos y donde la falta de agua hace más difícil pasar por allí.

    No había sombra. El sol brillaba tanto que José y maría tenían que ponerse su manto sobre la cabeza para no quemarse con aquel Sol.

    El viento Soplaba fuerte y les llenaba la ropa y el pelo de arena fina.

    Era un trayecto difícil, pero la esperanza siempre estaba acompanandolos peso a las dificultades del camino.

    En el día 5, José cuidaba la cantimplora de cuero como si fuera un tesoro. Cada sorbito de agua era para María. José, aunque tenía mucha sed, prefería que ella y el bebé estuvieran hidratados.

    María, al ver a José tan cansado, le compartía de su pan y le decía palabras bonitas para que él no se rindiera. ¡Se daban ánimos el uno al otro!

    En este día, el burrito ya estaba cansado. Sus patitas subían y bajaban por las piedras del camino. María le acariciaba las orejas y le susurraba: "Gracias, amiguito, ya casi llegamos". Pero el burrito sabía que llevaba una carga muy especial y caminaba con mucho cuidado para no tropezarse y que María no se cayera.

    Cuando llegó la noche del día 5, José buscó una cueva pequeña entre las rocas para protegerse del viento frío de la noche.

    Comieron dátiles (unas frutas muy dulces del desierto), pan seco y un poquito de queso.

    Todo estaba en silencio absoluto. Solo se escuchaba el fuego de la pequeña fogata y el sonido de los grillos. María miraba las estrellas y sentía que una de ellas brillaba más que las demás... ¡como si las estrellas también estuvieran emocionadas por el nacimiento de Jesús!


    Ellos no tenían miedo. Aunque estaban en medio de la nada, sentían en su corazón una paz increíble. Sabían que Dios era su guía. José revisaba las sandalias de María para ver si estaban bien y preparaba el camino para el día siguiente. Y así sabiendo que estarían a un día de camino de Belen y que Dios los acompañaba se prepararon para dormir

    Show More Show Less
    4 mins
  • 728. Día 4 Novena de Navidad (Infantil)
    Dec 19 2025

    Hacer click aquí para enviar sus comentarios a este cuento.

    Juan David Betancur Fernandez
    elnarradororal@gmail.com

    Maria y Jose habían aceptado que ellos serian los que tendrían el honor de ser los padres de el hijo de dios y todo y solo esperaban que pasaran los 9 meses para el nacimiento de aquel esperado bebe. Imagínense que María estaba tranquila en su casa, con la barriguita ya súper grande (9 meses), lista para que naciera el bebé. Ya tendría la ropita doblada y la cuna lista. Pero de repente... ¡Llegó una noticia malísima!

    El Emperador de Roma (que era como el "Presidente del Mundo" en esa época) se levantó un día y dijo: —"Quiero contar a todas las personas que viven en mi reino. ¡Que todo el mundo vaya a su ciudad de origen para anotarse en una lista!" se desarrollaría un conteo general de las personas de cada una de las poblaciones (A esto le llamaban "Censo").

    El problema era que José no era de Nazaret, él era de un pueblito llamado Belén. Y Belén quedaba lejísimos especialmente si maría estaba a punto de tener un bebe. Hoy en día uno se monta en el carro o en un bus y llega en un ratico. Pero en esa época... ¡tocaba irse caminando o en burro!

    Imagínense el panorama: María a punto de tener bebé, las maletas, el frío... y tener que salir a caminar días y días por caminos de tierra y piedras. Cualquiera de nosotros hubiera dicho: "¡Ay no, qué pereza! Yo no voy, qué señor tan cansón ese emperador".

    Pero aquí pasa algo muy curioso. El Emperador creía que él mandaba y que todo el mundo le obedecía. Él se sentía el más poderoso. Pero en todo esto estaba la mano de Dios, El emperador no sabía que, al dar esa orden, estaba ayudando a cumplir el plan de Dios.

    ¿Por qué? Porque los libros antiguos (las profecías) decían que el Salvador tenía que nacer en Belén. Así que, sin saberlo, ¡el emperador le estaba facilitando a Jesús para que naciera donde tenía que nacer! Dios sabe sacar cosas buenas hasta de los problemas.

    Debido a esta orden José y María armaron maletas. José, que era un esposo espectacular, preparó al burrito con mantas suaves para que María fuera lo más cómoda posible. Él iba caminando al lado, cuidándola de cada piedra del camino y el burrito sin saberlo iba llevando en su lomo a la madre el hijo enviado por Dios.

    La gente que los veía pasar por la carretera solo veía a una pareja humilde, cansada y llena de polvo. Nadie los saludaba con trompetas. Pero nosotros sabemos la verdad: Esa no era una pareja cualquiera. ¡Era una procesión! María era como una carroza de oro, porque llevaba adentro al Rey del Universo. Los ángeles iban acompañándolos invisibles, haciéndoles barra en el camino.

    Aunque el viaje fue duro, hacía frío y les dolían los pies, María y José no iban peleando ni renegando. Iban felices. ¿Por qué? Porque sabían que cada paso que daban los acercaba más al momento de verle la carita a Jesús. Llevaban a Dios con ellos, y cuando uno lleva a Dios, el camino se hace menos pesado.

    Show More Show Less
    5 mins
  • 727. Día 3 Novena de Navidad para niños (infantil)
    Dec 18 2025

    Hacer click aquí para enviar sus comentarios a este cuento.

    Juan David Betancur Fernandez
    elnarradororal@gmail.com


    Como veníamos diciendo el Arcangel Gabriel le pidió a Maria si quería ser ella la madre de el hijo de Dios. Y después de que Maria dijo que si el Angel se fue a darle la buena noticia a Dios. E inmediatamente ella empezó a sentir que estaba en embarazo como toda mama Pero ojo, este no era un embarazo cualquiera Maria era la madre de un ser glorioso. Y así mientras llevaba su vida normal e iba caminando por el pueblo, saludando a la vecina, yendo por agua, barriendo la casa, ella sabía que su futuro hijo era el mayor regalo de Dios para los seres humanos

    Ella era como un cofre del tesoro humano. Por fuera, se veía normal, pero por dentro llevaba la joya más valiosa del universo: al mismísimo Hijo de Dios.

    Y aquí es donde todos nos preguntamos come era posible que Dios mismo se hiciese tan pequeño que podía estar en la barriga de una mujer de Nazaret. Pero debemos recordar que para Dios nada es imposible y así el nacimiento de el hijo de Dios demoraría 9 meses.

    Ahora no podemos imaginar como se sentía María. El texto original de la novena dice que ella estaba "abrasada en caridad", que en para nosotros significa que tenía el corazón ardiendo de amor.

    Ella se tocaba la barriguita y pensaba: "¡Increíble! Aquí está mi Dios, pero también es mi hijo". Ella era la única que sabía la verdad. Cada latido del corazón de María era una canción de cuna para Jesús. Ella ya lo amaba con locura sin haberle visto la cara todavía.

    Y, ¿qué pensaba el Bebé Jesús allá adentro?. Su corazoncito de bebé ya estaba latiendo fuerte por nosotros. Él estaba contando los días. Decía: "Ya quiero salir, ya quiero verles la cara a mis amigos humanos para decirles cuánto los quiero y salvarlos de la tristeza".

    No tenía prisa por jugar o comer dulces; tenía prisa por abrazarnos y salvarnos. Estaba ansioso porque llegara el día de Navidad que es el día de su nacimiento y además sentía que su papel seria muy importante para el futuro de la humanidad ya que llevaría un mensaje de amor a todos aquellos que creyeran en el.

    Todo era amor en aquella casa donde vivía maría con su esposo Jose el carpintero. Y si bien eran pobres el saber que en el futuro tendrían un hijo bendecido por dios los hacia esperar con esperanza el próximo nacimiento del salvador.

    Show More Show Less
    4 mins
  • 726. Día 2 Novena de Navidad para niños (infantil)
    Dec 17 2025

    Hacer click aquí para enviar sus comentarios a este cuento.

    Juan David Betancur Fernandez
    elnarradororal@gmail.com

    Había una vez un dios llamado Jesus que estaban Buscando casa Imagínense a Jesus mirando y mirando con mucho cuidado el mapa de la Tierra. La verdad es que era muy importante encontrar el lugar y más importante encontrar quien sería su mama terrestre. Unos angeles que se las daban de consejeros le decían…. Jesus selecciona una reina bien poderosa y allí va a vivir en un palacio. Otros le decían Jesus mire ese hombre tan rico, seleccione a la esposa de el y vera como a usted no le va a faltar nada. Otros le decían …. Nooo usted merece vivir en un lugar muy maravilloso llego de bellezas naturales… todo para que usted viva confortablemente.

    Pero Jesus, que es súper sencillo y humilde, dijo: "No, nada de lujos. Yo quiero una mamá que tenga el corazón bonito, no necesito que tenga mucho dinero con que sea una mujer buena es suficiente. . Quiero alguien que sepa amar de verdad".

    Y buscando y buscando, sus ojos se detuvieron en un pueblito chiquitico y polvoriento llamado Nazaret. La verdad es que este Nazaret era bien pequeño tan pequeño que Ni siquiera salía en los mapas importantes. Allí en aquel pueblo vio a una muchacha joven, sencilla, estaba rezando en un rinconcito de su casa. Esta mujer se llamaba María.

    Ella no era famosa, no tenía joyas, pero tenía el corazón más limpio y bueno de todo el planeta. Y Jesus le dijo a Papa Dios: "¡Es ella! Ella es la perfecta".

    Entonces, Dios mandó a su mensajero estrella, el arcangel Gabriel, a darle la noticia. El Arcangel Gabriel era como el más encantador de todos los ángeles, con su sonrisa amplia y su mirada buena cautivaba a todos los que lo conocían. Sin embargo, por muy pinta que fuera esta arcargel maría cuando lo vio se pego macho susto. Estaba tranquila en su casa y de repente... ¡Pum! Un ángel lleno de luz se le aparece.

    El Arcangel le dijo algo así: —¡Hola, María! Dios está súper feliz contigo. Eres su favorita. María abrió los ojos grandes, sin entender nada. Y el Ángel soltó la bomba: —Te cuento que Dios quiere venir al mundo para salvarnos a todos, y te escogió a ti para ser su mamá. Que te parece la ideas….Sera que aceptas y lo recibes convertido en un Bebe.

    Y Ojo a esto: Dios, aunque es el Jefe de todo, le pidió permiso. No la obligó. María pudo haber dicho: "Uy no, qué miedo, eso es mucha responsabilidad, yo mejor paso". Pero no ella, que confiaba en Dios a ojos cerrados, respiró hondo y dijo la frase más valiente de la historia: —Listo yo estoy para lo que sea. (Bueno la verdad ella dijo: "He aquí la esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra", que en idioma de hoy es: "Yo confío en Dios, que Él haga conmigo lo que quiera, aquí estoy lista").

    En el mismísimo segundo en que María dijo "Sí", ocurrió el milagro. Y así Jesus el Dios, , se hizo chiquitico, microscópico, y empezó a vivir en la barriguita de María. Dejó de ser solo espíritu y empezó a tener manitos, piecitos y corazón de humano, igualito a como empezamos todos nosotros.

    Lo más extraordinario de todo eso es que Jesus ya no estaba lejos en el cielo. ¡Ya estaba aquí! Escondidito y creciendo en secreto, pero ya había llegado a nuestro mundo para ser parte de el

    Show More Show Less
    5 mins