• UN ÚNICO MEDIADOR
    May 13 2025

    UN ÚNICO MEDIADOR
    1 Timoteo 2:3 … Dios nuestro Salvador, 4 … quiere que todos se salven y lleguen a conocer la verdad. 5 Pues hay sólo un Dios y sólo un Mediador que puede reconciliar a la humanidad con Dios, y es el hombre Cristo Jesús. 6 Él dio su vida para comprarles la libertad a todos. Éste es el mensaje que Dios le dio al mundo justo en el momento preciso. NTV.
    Existen sectas y grupos religiosos que afirman ser la verdadera religión que puede llevar al hombre a la salvación y la vida eterna. También hay hombres o líderes religiosos que afirman ser los representantes de Dios aquí en la tierra. Estos hombres afirman tener poder y autoridad dada por Dios para perdonar los pecados de los hombres, darles salvación y vida eterna. De esta manera se muestran como los únicos mediadores entre Dios y los hombres. Todas estas afirmaciones o similares a estas, son erradas, ya que no existe una religión verdadera que pueda dar salvación a los hombres pues la religión no salva, ni tampoco existe un hombre que pueda mediar entre la humanidad y Dios, debido a que todos los hombres son igual de pecadores y no pueden servir de mediadores delante de Dios Padre.
    Para que la humanidad no caiga en la mentira de los movimientos religiosos o en la trama de sus líderes inescrupulosos, el eterno Creador a provisto la verdad del evangelio. Esta verdad, Dios lo reveló porque Su deseo es que toda la humanidad alcance la salvación y la vida eterna. Esta verdad es que existe un solo mediador entre Él y la humanidad pecadora. El mediador es Jesucristo, quien se encarnó, y vino a este mundo para entregar su vida por toda la humanidad. Los seres humanos están separados de Dios por el pecado, y sólo una persona en el universo puede pararse entre la humanidad pecadora y Dios. Jesús es el único que puede unir a la humanidad pecadora con su Creador, pues Jesús, que es Dios y hombre al mismo tiempo.
    Para ser mediador entre la humanidad pecadora y Dios, Jesús dio su vida como rescate por los pecadores. El alto precio que pagó para este rescate fue su preciosa sangre derramada en la cruz del calvario. La humanidad debido a su pecado, vive en una esclavitud, no física sino espiritual. Esta esclavitud trae consigo el castigo del pecado que es la muerte espiritual, la separación definitiva de Dios Padre. Todo aquel que muere bajo la esclavitud del pecado, recibirá la condenación eterna en el final de los tiempos, cuando Dios finalmente juzgue a todas las naciones de la tierra. Los malvados y pecadores serán condenados a una eternidad de sufrimiento en el lago de fuego, conjuntamente con satanás y todos sus aliados.
    En la cruz del calvario, Jesucristo con su sangre pagó el alto precio para liberar a la humanidad de la condenación de sus pecados. Su sangre fue sin mancha ya que no cometió ningún pecado. El Unigénito Hijo de Dios fue un cordero sin mancha y sin contaminación que se dio a sí mismo como un sacrificio perfecto. Murió como sustituto por la humanidad pecadora. Gracias a esta sustitución, por medio de la fe, el redimido recibe la limpieza perfecta del pecado, son declarados justos y sin pecado ante Dios, por medio de aquel que los rescató de las tinieblas del pecado. Cristo se dio a sí mismo como rescate no solamente por unos pocos escogidos, sino por toda la humanidad, esto incluye tanto al hombre, como a la mujer o el niño que vive, que ha vivido o que alguna vez vivirá en esta tierra. El mensaje del evangelio tiene un alcance mundial, no está limitado a una raza, un sexo o a un trasfondo nacional. Dios ama a todo el mundo y envió a su Hijo para salvar a todos los pecadores.
    Queridos hermanos. Existe un único mediador entre el hombre pecador y Dios. Es Jesucristo, Quien voluntariamente se despojó de su divinidad y se revistió de naturaleza carnal para entregar su vida por toda la humanidad. Solo Él puede salvar al hombre de la condenación del pecado y darle la posibilidad de vivir eternamente en el reino de los cielos.

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  • 1 Timoteo 1. JESÚS VINO A SALVAR PECADORES
    May 7 2025

    JESÚS VINO A SALVAR PECADORES

    1 Timoteo 1:15 La siguiente declaración es digna de confianza, y todos deberían aceptarla: Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el peor de todos. 16 Pero Dios tuvo misericordia de mí, para que Cristo Jesús me usara como principal ejemplo de su gran paciencia con aun los peores pecadores. De esa manera, otros se darán cuenta de que también pueden creer en él y recibir la vida eterna. NTV.

    Al momento de compartir el evangelio de la Cruz de Cristo, es común encontrarse con personas que afirman ser totalmente buenas y no tiene necesidad de arrepentirse, ya que no han hecho ninguna clase de maldad contra su prójimo y menos contra Dios. Pero tal afirmación de las personas, es contraria a la verdad del evangelio, ya que el evangelio declara que todas las personas son malvadas y perversas, por lo cual necesitan arrepentirse de sus pecados y buscar la salvación que Cristo ofrece gratuitamente. Precisamente, debido a la maldad del hombre, Jesucristo vino a este mundo para entregar su vida en la cruz del calvario, y así dar salvación a la humanidad pecadora.

    Contrario a algunas personas de su época y como las de la actualidad, el apóstol Pablo era consciente de que antes de tener un encuentro personal con Jesucristo, había sido pecador, pese a que rigurosamente practicaba la tradición religiosa de sus antepasados y servía a Dios. El conocimiento de las Sagradas Escrituras, así como no hacer mal a nadie, no implica que el hombre esté libre de pecado, ya que el hombre puede pecar con sus palabras, pensamientos o acciones. Ninguna persona está libre de su condición pecaminosa, la cual heredó de su antepasado Adán, el primer hombre que pecó contra Dios. Pablo al tener su encuentro personal con Jesucristo, comprendió esta verdad, y trató de transmitirlo a todas las personas, para que también lleguen a este conocimiento y busquen el perdón de Dios, alcancen la salvación y la vida eterna.

    Pablo anhelaba que todas las personas que llegaran a escuchar el evangelio, confiaran plenamente en sus palabras y las aceptaran en sus corazones. Además, deseaba que su audiencia comprendiera que el poder salvífico de Cristo no tenía límites, razón por la cual podía dar salvación a toda la humanidad, sin importar la gravedad de pecados que hayan cometido. Es un hecho cierto, Jesús vino al mundo para salvar pecadores, y ningún pecador está excluido de su poder salvador. El Unigénito Hijo de Dios no vino meramente para mostrar a los hombres cómo vivir una mejor vida o para desafiarlos a ser mejores personas. El vino para ofrecernos salvación y vida eterna en el reino de los cielos.

    Para mostrar que el poder salvífico de Jesucristo no tiene límites, el apóstol se puso como ejemplo de ser el peor de los pecadores y como en la gracia y misericordia del Señor, hallo el perdón de todos sus pecados. Para la gran mayoría de creyentes, el apóstol Pablo es considerado como un gran héroe de la fe, pero él nunca se vio a sí mismo de esa manera porque se acordaba de su vida antes de conocer a Cristo. Mientras más comprendía la gracia de Dios, más consciente era de su propia pecaminosidad. La vida de cada cristiano debería estar marcada por humildad y gratitud. El redimido por la sangre de Cristo, nunca debe olvidarse que es un pecador salvado por gracia. Salvado para que testifique delante de los hombres inconversos, como Dios también les puede salvar de la condenación eterna, sin importar la gravedad de los pecados que hayan cometido. Dios tiene el infinito poder para perdonar absolutamente cualquier pecado del hombre, liberarlo de la maldad y darle la posibilidad de que pueda vivir eternamente en el reino de los cielos.

    Queridos hermanos. Al igual que Pablo, todos nosotros antes de conocer a Jesucristo éramos el peor de los pecadores, pero en su gracia y misericordia, mostró su amor perdonando todos nuestros pecados.

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  • 2 Tesalonisenses 3. TRABAJAR DILIGENTEMENTE
    Apr 28 2025

    TRABAJAR DILIGENTEMENTE

    2 Tesalonisenses 3:6 Y ahora, amados hermanos, les damos el siguiente mandato en el nombre de nuestro Señor Jesucristo: aléjense de todos los creyentes que llevan vidas ociosas y que no siguen la tradición que recibieron de nosotros. 7 Pues ustedes saben que deben imitarnos. No estuvimos sin hacer nada cuando los visitamos a ustedes. 8 En ningún momento aceptamos comida de nadie sin pagarla. Trabajamos mucho de día y de noche a fin de no ser una carga para ninguno de ustedes. 9 Por cierto, teníamos el derecho de pedirles que nos alimentaran, pero quisimos dejarles un ejemplo que seguir. NTV.

    Las malas interpretaciones de las Sagradas Escrituras de algunos seudo maestros de la Palabra de Dios, llevan enseñanzas erróneas a los creyentes, quienes por su ignorancia las aceptan como verdades absolutas de parte de Dios para sus vidas. Las enseñanzas erróneas de las Escrituras no son nada nuevas, pues estas prácticas han sido una constante de quienes se oponen a la verdad de Dios, y fue visible también en la época ministerial del apóstol Pablo. En ese tiempo, algunos creyentes de la iglesia de Tesalónica, habían sido instruidos erróneamente, les enseñaron que debido a que la venida de Jesucristo podría tener lugar en cualquier momento, debían abandonar sus responsabilidades, dejar de trabajar, no hacer planes para el futuro y sólo esperar que llegara el día glorioso del regreso del Señor. Estas enseñanzas tenían algo de lógica, por eso algunos creyentes la acogieron y dejaron todas sus labores. Pero pronto, su falta de actividad les condujo al ocio y al pecado. Se convirtieron en carga para la iglesia, ya que tuvo que sostenerlos, desperdiciando los recursos y un tiempo valioso que pudo ser usado para ayudar a otros. No solo que llegaron a ser una carga para la iglesia, sino que también empezaron a entrometerse en la vida de los creyentes que no acogieron tales enseñanzas erróneas.

    El creyente por ningún motivo debe dejar de trabajar o hacer sus actividades cotidianas, aun cuando sepa que el día y la ora del regreso de su Señor y Salvador está muy cerca. En su espera al regreso de Cristo, el creyente tiene que ser diligente con sus labores terrenales para poder suplir todas sus necesidades y las necesidades de sus familiares. Por testimonio ante los inconversos y los propios creyentes, el creyente no tiene que ser una carga para el estado, la iglesia o para su familia. Precisamente el apóstol Pablo ante la actitud de algunos creyentes de la iglesia de Tesalónica, ordenó a los fieles creyentes a que se apartaran de estos malos miembros del cuerpo de Cristo. Y a los que habían dejado sus labores, les ordenó a que volvieran a sus trabajos, recalcándoles que él les había dado un ejemplo de cómo debe actuar un hijo de Dios.

    Pablo y sus compañeros mientras estuvieron en Tesalónica cumpliendo sus labores ministeriales, trabajaron duro para comprar lo que necesitaban en lugar de ser una carga para los creyentes de la iglesia emergente. Ellos como siervos de Dios y expositores del evangelio, tenían derecho de que los que eran beneficiarios de sus labores ministeriales, les sustentaran, pero no se acogieron a ese derecho, en su lugar, trabajaron durante su descanso de las labores ministeriales. La regla que siguieron fue si alguno no quiere trabajar, tampoco coma. Hay diferencia entre descanso y ociosidad. El relajarse y recrearse provee un balance necesario para la vida, pero cuando es tiempo de trabajar, los cristianos deben ser diligentes en hacerlo. Deben usar al máximo cada uno de sus talentos, aprovechar el tiempo y hacer todo lo necesario para buscar el sustento diario y el sustento de quienes dependen de ellos. Se debe descansar cuando se tiene que descansar y trabajar cuando se tiene que trabajar.

    Queridos hermanos. El regreso de Cristo por los suyos posiblemente este cerca, pero esto no debe ser una excusa para dejar nuestras labores cotidianas como el trabajo y esperarle con los brazos cruzados.

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  • 2 Tesalonisenses 2. HECHOS CLAVES
    Apr 22 2025

    HECHOS CLAVES


    2 Tesalonisenses 2:1 Ahora, amados hermanos, aclaremos algunos aspectos sobre la venida de nuestro Señor Jesucristo y cómo seremos reunidos para encontrarnos con él. 2 No se dejen perturbar ni se alarmen tan fácilmente por los que dicen que el día del Señor ya ha comenzado. No les crean, ni siquiera si afirman haber tenido una visión espiritual, una revelación o haber recibido una carta supuestamente de nosotros. 3 No se dejen engañar por lo que dicen. Pues aquel día no vendrá hasta que haya una gran rebelión contra Dios y se dé a conocer el hombre de anarquía, aquél que trae destrucción.4 Se exaltará a sí mismo y se opondrá a todo lo que la gente llame «dios» y a cada objeto de culto. Incluso se sentará en el templo de Dios y afirmará que él mismo es Dios. NTV.


    Los rumores acerca de la cercanía del regreso de Jesucristo a este mundo, cada día crecen más y más, esto se debe a las diferentes señales que se están manifestando a lo largo del planeta. Señales como: Terremotos, maremotos, largas sequías o lluvias torrenciales, incremento de la delincuencia, malos gobernantes, aprobación de leyes en contra de los valores aprobados por Dios, etc. Al ver todas estas señales, algunos maestros de la Biblia, hacen sus propias conjeturas y dan por hecho que estas señales marcan la cercanía del regreso de Cristo Jesús a este mundo y lo proclaman. Al escuchar estas enseñanzas, muchas personas la creen, ya que están listas a creer cualquier rumor que venga acerca del regreso de Jesucristo. Esto se debe especialmente porque las personas no han estudiado con cuidado lo que Dios dice acerca de ese día pavoroso. Al igual que las personas de esta época, algunos creyentes de la iglesia de Tesalónica no eran nada diferentes, pues ellos estaban dispuestos a creer en cualquier enseñanza en cuanto al regreso de Jesucristo y el fin del mundo.


    En ese tiempo, una noticia falsa circulaba con respecto al fin del mundo entre los creyentes de esa iglesia. El resultado fue que algunos de los tesalonicenses empezaban a perturbarse al escuchar esta noticia. El rumor habría implicado que las señales finales de los últimos tiempos estaban sucediendo y que la venida de Cristo era inminente. Estas señales hacían más creíbles las falsas noticias anunciadas por los falsos maestros, o por los creyentes que no habían comprendido las enseñanzas del apóstol Pablo en cuanto a este tema. Ante la perturbación de algunos creyentes de Tesalónica, Pablo se dispuso a aclarar el tema, por miedo a que su efecto perturbador en el pueblo de Dios continuara y tal vez se propagara a toda la comunidad cristiana.


    Lo que dio a este rumor algo de veracidad, fueron los comentarios mal intencionados de algunos maestros de la Biblia, que habían afirmado que Pablo mismo fue quien había dicho que el día del Señor ya había venido. En su primera carta Pablo en verdad había empleado bastante tiempo instruyendo a los tesalonicenses acerca de la venida de Jesús y del encuentro de los creyentes con Él en las nubes. Sin embargo, ante estos rumores, el apóstol negó categóricamente que él hubiera dicho alguna vez que el día del Señor ya había llegado. Aunque esta declaración se suponía que había salido de boca de Pablo, él negó rotundamente que hubiera mencionado tal cosa ni por espíritu, ni por palabra, ni por carta. Por eso, instó a los creyentes a no escuchar más tal engaño, sin importar de quien viniese. Además, les recalcó que el regreso del Señor no se dará, sin antes que se produzca una gran rebelión contra Dios y se dé a conocer el anticristo, aquél que trae caos y destrucción. Pues él sería especialmente responsable por la apostasía, es decir, por la deserción porque sería un líder poderoso e influyente que pretendería tomar el lugar de Cristo. El anticristo tratará de tomar el lugar de Cristo y de guiar a la gente lejos de Él, llevándolos consigo a la condenación eterna junto a él.



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  • 2 Tesalonisenses 1. PERMANECER EN ORACIÓN
    Apr 14 2025

    PERMANECER EN ORACIÓN


    2 TESALONISENSES 1:11 Así que seguimos orando por ustedes, pidiéndole a nuestro Dios que los ayude para que vivan una vida digna de su llamado. Que él les dé el poder para llevar a cabo todas las cosas buenas que la fe los mueve a hacer. 12 Entonces el nombre de nuestro Señor Jesús será honrado por la vida que llevan ustedes, y serán honrados junto con él. Todo esto se hace posible por la gracia de nuestro Dios y Señor, Jesucristo NTV.


    Conservar todos los valores de la ética y la moralidad aprobados por el eterno Creador, está sobrevalorado, debido a que el pecado domina la mente y el corazón de los hombres. Este dominio del pecado hace que los hombres prefieran disfrutar de los placeres de la carne, y la inmoralidad, antes que llevar una vida integra de conducta intachable delante de los hombres y de Dios. Los pocos hombres que viven conservando los valores de la ética y la moralidad son vistos como raros y no pertenecientes del grupo de la mayoría. En ocasiones son causa de burlas y aislados de los círculos sociales por la vida honorable que han decidido llevar. Precisamente para no ser causa de burlas y aislados de los círculos sociales, algunos van abandonando la ética y la moralidad, y adoptan el comportamiento aprobado por la mayoría de los hombres que viven en la inmoralidad. En este abandono de la conducta ética y moral aprobados por el eterno Creador, caen algunos creyentes inmaduros, pues prefieren la aprobación de los hombres antes que la aprobación de Dios.


    Tras su conversión, el creyente debe llevar una vida digna y honorable delante de los hombres inconversos, pues para eso fueron llamados y redimidos del poder del pecado. El anhelo de Dios es que sus hijos redimidos por la sangre de su amado Hijo Cristo Jesús, vivan bajo Él en su reino y le sirvan en justicia, inocencia y bienaventuranza eternas. Tal como es el anhelo de Dios, también fue el anhelo del apóstol Pablo. Él anhelaba que los creyentes de Tesalónica llevasen una vida digna y honorable al llamado que habían recibido de parte de Dios. Por eso, oraba fervientemente para que Dios en su gracia y misericordia haga a los miembros de la iglesia de Tesalónica dignos de este eminente llamado.


    El nuevo hombre creado en los redimidos por la sangre de Jesucristo, es capaz sólo de las buenas intenciones y las buenas acciones movidas por la fe, pero el viejo hombre o naturaleza carnal se oponen completamente a esas intenciones y acciones. Es en esta lucha que es permanente en cada cristiano, que el viejo hombre se impone fácilmente, recibe el apoyo de todos los poderes sobrehumanos del maligno, de potestades de los gobernadores de las tinieblas de este mundo y de las huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. En esta constante lucha, todo cristiano necesita la ayuda de Dios para no ser vencidos fácilmente por las tentaciones. Dios con su infinito poder, desbarata y estorba todo mal propósito y toda mala voluntad del enemigo, y de la vieja naturaleza carnal. Al igual que el apóstol Pablo, los creyentes deben orar fervientemente para que el poder de Dios descienda en sus vidas, y no ser presa fácil de las tentaciones que envía el maligno. Solo con el poder de Dios, el creyente podrá vencer toda asechanza maligna y de esta manera llevar una vida santa, realizando buenas obras movidas por la fe y el Espíritu Santo que mora en ellos. Cuando los creyentes llevan una vida santa y honorable, el Señor es honrado, y no solo eso, sino que también el creyente será honrado conjuntamente con su Señor y Salvador Cristo Jesús, gracias a Su infinita Gracia.


    Queridos hermanos. Nuestro nuevo hombre también puede ser vencido fácilmente por nuestra vieja naturaleza de pecado, pese a que podamos ser maduros en la fe, ya que el maligno nos conoce y sabe cómo nos puede seducir para que pequemos y caigamos. Por eso, es importante que permanezcamos en oración para que Dios nos capacite a pensar y actuar únicamente movidos por la fe.

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  • 1 TESALONISENSES 5. VIGILANTES AL REGRESO DE CRISTO
    Apr 10 2025

    VIGILANTES AL REGRESO DE CRISTO


    1 Tesalonisenses 5:2 Pues ustedes saben muy bien que el día del regreso del Señor llegará inesperadamente, como un ladrón en la noche. 3 Cuando la gente esté diciendo: Todo está tranquilo y seguro, entonces le caerá encima la catástrofe tan repentinamente como le vienen los dolores de parto a una mujer embarazada. Y no habrá escapatoria posible. 4 Pero ustedes, amados hermanos, no están a oscuras acerca de estos temas, y no serán sorprendidos cuando el día del Señor venga como un ladrón. 6 Así que manténganse en guardia, no dormidos como los demás. Estén alerta y lúcidos.


    El regreso de Jesucristo por los suyos, no es un tema oculto para los creyentes, ya que existen algunos pasajes en las escrituras que hablan acerca de este tema en particular. Jesucristo mismo habló a sus discípulos acerca de su regreso a este mundo tras preparar el lugar de morada celestial para todos los que le acepten como su Señor y Salvador. Las palabras del Señor en cuanto a su regreso son verdaderas, así como todos los pasajes de las Escrituras que hablan acerca de Su regreso. Por estas evidencias existentes en las páginas de las Sagradas Escrituras, los creyentes tienen un conocimiento amplio de todos los acontecimientos que se darán lugar cuando finalmente regrese el Señor para llevarlos consigo al reino de su amoroso Padre Celestial.


    Pese a que los acontecimientos que se darán lugar durante el regreso de Jesucristo están debidamente detallados en las Escrituras, no se da una fecha exacta de cuándo finalmente sucederá, por eso, todo aquel que espera el regreso de su Señor y Salvador, deberá estar atento, esperando ese anhelado regreso. Esto justamente les dijo el apóstol Pablo a los creyentes de Tesalónica. Los miembros de la iglesia de Tesalónica, sabían muy bien de los acontecimientos que se darán lugar en el regreso de Jesucristo, puesto que Pablo mismo les había explicado cuando estuvo con ellos. Pero en sus enseñanzas, no les dio una fecha en concreto de cuándo ocurrirá, por este desconocimiento de la fecha, algunos creyentes de Tesalónica estaban inquietos, pues querían conocer esa fecha para no ser sorprendidos cuando finalmente regresara Jesucristo.


    Pese a la inquietud de los creyentes, el apóstol no les dio una fecha del regreso del Señor, en su lugar les alentó a estar siempre preparados y listos para encontrarse con Él en su regreso, ya que el Señor regresará mientras menos le esperen como un ladrón en la noche. La fecha del regreso de Jesucristo es incierta, por eso, los cristianos deben estar atentos y despiertos, no como los incrédulos que no saben acerca del regreso de Jesús, por eso, ellos duermen tranquilos sin esperar ese día glorioso. Los creyentes han sido liberados del dominio de las tinieblas, son retirados de la noche de pecado e ignorancia y colocados en la luz de Dios. Puesto que los cristianos están en la luz, no deberían dormir en la indiferencia espiritual y la complacencia, sino mantenerse vigilantes y alerta sobre las cosas espirituales que los rodean. La manera de que un creyente esta vigilante al regreso de su Señor, es por medio de la comunión con otros creyentes, la oración, el estudio de las Sagradas Escrituras, el servicio dentro de su cuerpo con los dones y talentos que ha recibido, y el servicio no solo dentro del cuerpo de Cristo que es la iglesia, sino también fuera de ella. Los inconversos por medio de las buenas obras del creyente deben percibir: el amor, el cuidado, la protección, la bondad y la misericordia de Dios. Si el creyente lleva una vida reflejando las cualidades de Cristo, nunca estará dormido, sino que estará siempre vigilante y atento al regreso de su Señor y Salvador, Cristo Jesús.


    Queridos hermanos. Es un misterio la fecha del regreso de Jesucristo por los suyos, pero esto no implica que la promesa de Su regreso sea una falacia,

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  • 1 Tesalonisenses 4. LA MUERTE NO ES EL FINAL
    Apr 1 2025

    LA MUERTE NO ES EL FINAL

    1 Tesalonisenses 4:13 Y ahora, amados hermanos, queremos que sepan lo que sucederá con los creyentes que han muerto, para que no se entristezcan como los que no tienen esperanza. 14 Pues, ya que creemos que Jesús murió y resucitó, también creemos que cuando Jesús vuelva, Dios traerá junto con él a los creyentes que hayan muerto. 15 Les decimos lo siguiente de parte del Señor: nosotros, los que todavía estemos vivos cuando el Señor regrese, no nos encontraremos con él antes de los que ya hayan muerto. 16 Pues el Señor mismo descenderá del cielo con un grito de mando, con voz de arcángel y con el llamado de trompeta de Dios. Primero, los cristianos que hayan muerto se levantarán de sus tumbas. NTV.

    La muerte no es el final para los hombres, pues hay algo más allá de ella. Todo depende si el hombre muere con Cristo o sin Cristo. Todos los hombres que mueren aceptando a Jesucristo como su Señor y Salvador, tienen una esperanza de vida, pero en esta tierra, sino en el reino de los cielos. Las personas que mueren con Cristo en sus corazones, en realidad duermen y esperan ser despertados o resucitados cuando el Unigénito Hijo de Dios los llame desde las nubes. Los que mueren sin haber aceptado el Señorío de Jesucristo, también serán resucitados, pero no en el mismo tiempo que los hijos de Dios, sino en otro tiempo, para ser juzgados y sentenciados a una eternidad de sufrimiento en el lago de fuego.

    Antes de la revelación total acerca del misterio de la resurrección, los hijos de Dios del Antiguo Testamento, tenían un conocimiento imperfecto e incompleto de lo que le sucedía a una persona cuando moría. Creían que todos llegarían a morir, que aparentemente habría una gran resurrección al fin del mundo, y luego un juicio. Este conocimiento imperfecto e incompleto, fue finalmente revelado en su totalidad con la venida del Unigénito Hijo de Dios a este mundo. Jesucristo reveló todo el misterio de lo que sucedería con los hijos de Dios tras la muerte. Reveló que habrá más de una resurrección. En el Arrebatamiento, sólo los creyentes serán levantados de entre los muertos; los incrédulos o inconversos; serán levantados al final del reinado de mil años de Cristo para ser juzgados y sentenciados a una eternidad de sufrimiento en el lago de fuego.

    Esta revelación hecha por Jesucristo, fue enseñada por el apóstol Pablo cuando por primera vez estuvo en Tesalónica. El apóstol enseñó a los creyentes de esa localidad acerca de la venida de Cristo a reinar, y los acontecimientos que seguirían a Su venida, pero estas enseñanzas no habían quedado tan claras. Por eso, algún tiempo después de la partida del apóstol de Tesalónica, habían surgido problemas y dudas entre los creyentes acerca de sus hermanos en Cristo que habían muerto antes de que el Señor regresara. Ellos pensaban: ¿Quedarían sus cuerpos en los sepulcros hasta el último día? ¿Quedarían excluidos de participación en la venida de Cristo y de Su glorioso reinado? Para responder a sus inquietudes, y aplacar sus temores, Pablo les describe detalladamente el orden de los acontecimientos en el tiempo de la venida de Cristo para llevar a los suyos. El apóstol les dio a conocer a los creyentes de Tesalónica, que los primeros que se encontrarían con el Señor en su venida, serían justamente sus hermanos en la fe que habían fallecido, y solo después, los creyentes que aun estén con vida, serán arrebatados para encontrarse con el Señor en las nubes.


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  • UNA CARGA PARA LA CONGREGACIÓN
    Mar 24 2025

    UNA CARGA PARA LA CONGREGACIÓN


    1 Tesalonisenses 2:5 … ¡Y Dios es nuestro testigo de que nunca aparentamos ser amigos de ustedes con el fin de sacarles dinero! 7 Como apóstoles de Cristo, sin duda teníamos el derecho de hacerles ciertas exigencias; sin embargo, … fuimos como una madre que alimenta y cuida a sus propios hijos. 9 ¿Acaso no se acuerdan, amados hermanos, cuánto trabajamos entre ustedes? Día y noche nos esforzamos por ganarnos la vida, a fin de no ser una carga para ninguno de ustedes mientras les predicábamos la Buena Noticia de Dios. NTV.


    En los últimos tiempos, muchas personas inescrupulosas, han visto a la predicación de las buenas nuevas de salvación y vida eterna, como un negocio rentable, razón por la cual se han dedicado a proclamar el evangelio a los hombres sin tener el llamado de Dios, ni el don del Espíritu Santo para hacerlo. Por eso los mensaje que exponen o comparten, no están cien por ciento apegados a las Escrituras, sino que están distorsionados y sacados de contexto, pues solo así pueden enredar a los hombres en sus tramas, mentiras y engaños. Con esta distorsión del evangelio, se aprovechan de la fe de las personas que realmente buscan ese encuentro personal con Dios y la salvación de sus almas. Una vez que tienen enredado a los creyentes con sus falsas enseñanzas, los incitan a entregar sus recursos económicos, así como sus pertenencias y posesiones, para esto aducen que ellos son obreros de Dios y son dignos de recibir un salario por la exposición del evangelio.


    Por su puesto que ciertos pasajes de las Escrituras, afianzan la idea de que los que predican el evangelio, tienen que vivir del evangelio, pero los verdaderos siervos de Dios, no proclaman el evangelio con la intención de recibir alguna paga por hacerlo, sino con la intención de poder dar a conocer el evangelio de la cruz y expandir el reinado de Jesucristo en el corazón de toda la humanidad. Para estos siervos, la satisfacción de poder haber llegado con el poder del evangelio al corazón de los hombres y ver su conversión a Cristo, es su paga. Este trabajo desinteresado es aprobado por Dios, y en Su justicia, no se olvida de sus fieles siervos, sino que a su debido tiempo les retribuirá por su trabajo realizado.


    Un trabajo desinteresado de proclamar el evangelio de la cruz fue realizado por el apóstol Pablo, Silas y el joven Timoteo. Ellos sin ninguna clase de interés personal o algún redito económico, cuando llegaron a Tesalónica, concentraron todos sus esfuerzos en la presentación del mensaje de Dios para la salvación de los tesalonicenses. Durante su estadía en Tesalónica, Pablo, Silas y Timoteo, no quisieron ser una carga para los nuevos creyentes de esa localidad, por eso no hicieron ninguna clase de exigencia para que los sustentaran, aunque tenían todo el derecho de hacerlo de acuerdo a los escritos de Moisés, sino que ellos juiciosamente trabajaron de noche y de día para cubrir cada una de sus necesidades, y no solo eso, sino que también se preocuparon como una madre o como un padre de apoyar y sustentar a los más necesitados de la congregación de creyentes que se estaba formando. Un verdadero siervo de Dios, no desea ser una carga para la congregación, por eso organiza su tiempo para proclamar el evangelio y para trabajar en alguna actividad económica que le ayude a cubrir sus necesidades tal como lo hizo el apóstol Pablo, Silas y Timoteo, y muchos otros fieles siervos de Dios en el pasado.



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