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Penelope Wilton narrates BBC Radio 4’s epic dramatisation of the treasured family saga Elizabeth Jane Howard’s five book chronicle of the upper-middle class. Cazalet family begins in 1938, as siblings Hugh, Edward, Rupert and Rachel join together for another family holiday at Home Place, their house in the Sussex countryside. During the course of The Light Years, Marking Time, Confusion, Casting Off and All Change, the progress of their lives, and those of their children, will be charted.

A beautiful, very moving, melancholic and elegiac novel set in the late 1960s in Melton, a small town in the West Country. The story revolves around a disparate group of people who come together there to establish an arts festival...This is the story of their intertwining relationships and how they come to love, and not to love each other in different ways and why - a perfect book to curl up and read by the fireside on an autumn afternoon and as satisfying a read as Brief Encounter is a film.

The final book in the landmark Cazalet Chronicles, recently broadcast on BBC Radio 4. It is the 1950s and as the Cazalets' beloved matriarch, the Duchy, passes away, she takes with her the last remnants of a world - of great houses and servants, of class and tradition - in which the Cazalets have thrived. Louise, now divorced, becomes entangled in a painful affair; while Polly and Clary must balance marriage and motherhood with their own ideas and ambitions.

Mars 1942. La guerre suit son cours. Sybil vient de succomber au cancer qui la rongeait. Rupert n'a plus donné signe de vie. Le quotidien à Home Place est rythmé par le deuil, les restrictions de nourriture et de chauffage, l'attente de nouvelles à la radio. Polly et Clary ont dix-sept ans et s'installent à Londres pour y trouver du travail. Louise abandonne ses rêves d'actrice pour épouser Michael, officier dans la Marine, qui passe son temps en mer tandis que Louise donne naissance à Sebastien.

El de 1937 y el de 1938. Dos veranos inolvidables, a salvo bajo la dorada luz de Sussex, donde los días se consumen en una sucesión de juegos infantiles y pícnics en la playa. Tres generaciones de la acomodada familia Cazalet reunidas en su finca natal. Los quehaceres de dos abuelos, cuatro hijos, nueve nietos, innumerables parientes políticos, criados y animales domésticos que abarcan desde lo cotidiano hasta lo más trascendental.

I giorni della spensieratezza e dei giochi sono ormai passati. È il settembre del 1939 e l'ombra della guerra si allunga cupa sulla vita dei Cazalet. In questo clima di sospensione, tra tradimenti, segreti e nascite inaspettate, mentre la famiglia attende che tutto torni come un tempo, le tre ragazze fremono d'impazienza e di desideri. Louise sogna di diventare una grande attrice, Clary fa i suoi primi tentativi di scrittura, mentre la sensibile Polly è alle prese con le insicurezze e le domande dell'adolescenza.

Década de 1950. Con el fallecimiento de la Duquesita, matriarca indiscutible del clan de los Cazalet, desaparecen también para siempre los últimos vestigios del mundo de ayer, ese entorno privilegiado en el que prosperó la familia, un universo de grandes mansiones y leales sirvientes, un perfecto equilibrio entre clase, ocio y tradición.

Estamos en 1945, la guerra ha terminado. El momento tan anhe¬lado por los Cazalet ha llegado finalmente, pero una Inglaterra atormentada por las privaciones y la desintegración del Imperio ensombrece la emoción por la noticia. En Home Place, la Navidad tendrá ese año un sabor agridulce: el de la luminosa promesa de una nueva era, el de la añoranza de una época que no habrá de volver.

La última gran saga familiar de la literatura inglesa del siglo XX.

Primavera de 1942, el mayor conflicto armado de la historia de la humanidad se adentra en su cuarto año. Las incursiones aéreas y el racionamiento son moneda corriente, el caos se ha convertido en una forma de vida. Sin embargo, algo empieza a moverse entre los jóvenes Cazalet: el tiempo de espera ha terminado y el ingreso en el incitante mundo adulto parece haber llegado por fin.

El de 1937 y el de 1938. Dos veranos inolvidables, a salvo bajo la dorada luz de Sussex, donde los días se consumen en una sucesión de juegos infantiles y pícnics en la playa. Tres generaciones de la acomodada familia Cazalet reunidas en su finca natal. Los quehaceres de dos abuelos, cuatro hijos, nueve nietos, innumerables parientes políticos, criados y animales domésticos que abarcan desde lo cotidiano hasta lo más trascendental.

Estamos en 1939. Hitler acaba de invadir Polonia y los primeros nubarrones de la guerra van ensombreciendo la vida de los Cazalet: en su residencia de Sussex hay que cegar la luz de las ventanas, la escasez de alimentos empieza a hacerse notar y las exigencias del esfuerzo bélico obligan a los miembros de la familia a enfrentar complicadas decisiones. Algunos hombres --los ancianos, los lisiados-- tienen que resignarse a ver cómo los demás son llamados a luchar por su país; otros, en cambio, solo querrían regresar intactos a casa tras el infierno de Dunquerque.

Década de 1950. Con el fallecimiento de la Duquesita, matriarca indiscutible del clan de los Cazalet, desaparecen también para siempre los últimos vestigios del mundo de ayer, ese entorno privilegiado en el que prosperó la familia, un universo de grandes mansiones y leales sirvientes, un perfecto equilibrio entre clase, ocio y tradición.

Primavera de 1942, el mayor conflicto armado de la historia de la humanidad se adentra en su cuarto año. Las incursiones aéreas y el racionamiento son moneda corriente, el caos se ha convertido en una forma de vida. Sin embargo, algo empieza a moverse entre los jóvenes Cazalet: el tiempo de espera ha terminado y el ingreso en el incitante mundo adulto parece haber llegado por fin.

La colosal saga familiar de Elizabeth Jane Howard, el último gran clásico de las letras inglesas del pasado siglo, da en este cuarto volumen de la serie un memorable paso adelante hacia su brillante y esperada culminación.

La paix est enfin signée, Rupert est de retour après cinq ans d'absence et la famille décide de quitter Home Place pour retourner vivre à Londres. Mais l'Angleterre est ébranlée, tout comme les certitudes et les mœurs des Cazalet. La mort du Brig et le divorce d'Edward et de Villy apportent leur lot de tensions. Les plus âgés des enfants Cazalet sont désormais adultes. Louise s'ingénue à trouver des échappatoires à son mariage, et tente de revenir à sa première passion, le théâtre.

Septembre 1939. La Pologne est envahie et la famille Cazalet apprend l'entrée en guerre de l'Angleterre. A Home Place, la routine est régulièrement bousculée par les raids allemands. Louise rêve toujours de jouer Hamlet mais doit d'abord passer par une école de cuisine. Au grand dam de sa famille, elle fume, porte des pantalons, découvre la sexualité et fait ses débuts en tant qu'actrice dans un sinistre théâtre de province. Clary, dont le père, Rupert, est porté disparu sur les côtes françaises, renseigne scrupuleusement chaque parcelle de sa vie dans des carnets.

Juillet 1937. A Home Place, au cœur du Sussex, jardiniers, femmes de chambre et cuisinière sont sur le pont. La Duche orchestre le ballet des domestiques avant l'arrivée de ses trois fils, Hugh, Edward et Rupert Cazalet, en chemin depuis Londres avec épouses, enfants et gouvernantes. Où dormira Clary, adolescente mal dans sa peau en plein conflit avec sa belle-mère ? Quelle robe portera Villy, ancienne ballerine désormais mère au foyer ?

È l'estate del 1937 e la famiglia Cazalet si appresta a riunirsi nella dimora di campagna. Ad attenderli, uno stuolo di cameriere e domestici, lunghe passeggiate, il tè a letto la mattina, segreti e bugie. I due capostipiti, affettuosamente soprannominati il Generale e la Duchessa, vigilano su atmosfere d’altri tempi. Ma sotto la rassicurante e rigida morale vittoriana qualcosa sta cominciando a cambiare. Un romanzo "che mette voglia di divorare al più presto anche gli altri quattro capitoli della saga dei Cazalet." (Mario Fortunato, L'Espresso)

Londra, anni Sessanta. Sono trascorsi vent'anni dalla morte di Julius, ma il suo ultimo gesto eroico ha lasciato un segno indelebile nelle vite dei suoi cari. Emma, la figlia minore, lavora nella casa editrice di famiglia e rifugge spaventata dagli uomini. Al contrario, Cressida, la maggiore, cerca di placare la sua brama d'amore con una girandola di uomini sposati. Nel frattempo Esme, la vedova di Julius, ancora attraente alla soglia dei sessant'anni, vive sprofondata nella routine domestica della sua bellissima casa color rosa pesca.